Raymundo Ibáñez del Castillo.
Una vez más, como lo han hecho siempre; y ahora, por la falta de planeación, organización y seriedad en los programas, dizque sociales, específicamente de la llamada Beca «Benito Juárez», el gobierno del autoritarismo, con la marioneta principal a la cabeza, mienten, engañan, roban y traicionan a los mexicanos.
Claudia Sheinbaum Pardo, Ariadna Montiel Reyes y Mario Martín Delgado Carrillo, mienten a los «becarios» desde la Presidencia de la República, la Secretaría de Bienestar y la Secretaría de Educación Pública, porque confunden y siembran la incertidumbre entre los «beneficiarios», al dar a conocer «oficialmente» información falsa, que en la realidad, es totalmente diferente y hasta contradictoria.
Engañan, porque abusando de la nobleza y de la necesidad de los «beneficiarios», hasta lucran con ellos, porque una cosa es lo que les dicen, y otra completamente diferente, es lo que hacen en la práctica y que afecta directamente a los supuestos «becarios».
Roban, porque si no les dan a tiempo el dinero de la «beca», que les prometieron, se presta para todo, e incluso, a robarles parte o todo el «beneficio», que supuestamente les corresponde.
Traicionan la buena fe de los mexicanos, especialmente de niños, adolescentes y jóvenes, porque los ilusionan con «algo» que ni les alcanza para pagar su inscripción, libros, útiles escolares y uniformes, como es el caso de los estudiantes que cursan el nivel Medio Superior.
Tan solo, uno de los más de 131.1 millones de mexicanos, que sea víctima de la mentira, el engaño, el robo y la traición, sería imperdonable, porque nadie tiene derecho de hacerlo con nadie, y menos en contra de los niños, adolescentes o jovenes, como ocurre, desgraciadamente, en el caso de las»becas».
Con mucha más razón, cuando se miente, se engaña, se roba y se traiciona, a miles de «beneficiarios», como es el caso específico de estudiantes del nivel de bachillerato o preparatoria, que suman más de 2 millones 500 mil jóvenes, a quienes supuestamente les corresponden 920 pesos mensuales a cada uno de ellos y que según el régimen del autoritarismo, este mes de diciembre, recibirían un pago de 3 mil 680 pesos.
En presencia de Claudia Sheibaum Pardo, en la llamada «mañanera del pueblo», que desde el inicio del docenio del autoritarismo, se utiliza para mentir, engañar y traicionar al pueblo de México, del pasado lunes 2 de diciembre, el ex dirigente del partido de la «mafia en el poder» y ahora «flamante» Secretario de Educación Pública, a donde jamás se imaginó llegar, Mario Martín Delgado Carrillo, cínicamente se comprometió a que a partir de ese día, se estaría depositando directamente a los «beneficiarios», los montos correspondientes a los dos últimos bimestres del año.
Y tan no ha ocurrido, como lo anunciaron públicamente, en presencia de representantes de los medios de comunicación, que hasta la fecha, no se ha cumplido con el calendario, también dado a conocer ese mismo día, cuando ha transcurrido una semana y media y falta otro tanto igual para que termine.
Es más, la improvisación del gobierno del autoritarismo es tal, que ni organizan, ni planean y tampoco le dan seriedad a los programas de malestar ya establecidos, y ya están sobre otra cosa, como es la nueva beca llamada «Rita Cetina», que como en todas las otras, hacen creer que será para todos los estudiantes de preescolar, primaria y secundaria.
Y si hacemos cuentas de cuánto les redituaría a plazo fijo, al día o durante un mes o un año, en cualquiera de las instituciones bancarias, a quienes hacen y deshacen con los recursos públicos, 60 mil millones de pesos que supuestamente se paga a diez mil «becarios», entenderíamos a ciencia cierta, el por qué se «jinetea» tanto el dinero de los mexicanos.
Lo cierto es que el calendario de pagos dado a conocer desde la Presidencia de la República, está avanzando y rápidamente llegará a su fin, porque comprende del 2 al 24 de diciembre, sin que les hagan el depósito correspondiente a los «becarios».
Y no será sino hasta fines de enero o a principios de febrero del próximo año, 2025, cuando apenas se les estará informando directamente a los «beneficiarios», cuándo les harán efectivo lo que anunciaron oficialmente y que dispondrían, en diciembre, de acuerdo con la primera letra de su apellido paterno.
Y si tuvieran vergüenza, que ni la conocen, no mentirían, ni engañarían, tampoco robarían y menos traicionarían vilmente a los «becarios» de esta manera, porque hay quienes, incluso, para poder continuar sus estudios del siguiente nivel, específicamente medio superior, tuvieron que empeñar sus pertenencias de valor, o caer en manos de agiotistas sin escrúpulos y así pagar su inscripción, libros, útiles escolares y uniformes, para lo que, obviamente, no les alcanza la engañosa «bequita».
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